Vicepresidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), Roberto Uparela, anunció que avanzan las obras en el kilómetro 18 de la vía Bogotá–Villavicencio, uno de los puntos críticos que más afecta la movilidad entre la capital del país y el Meta.
Según el funcionario, el objetivo es habilitar dos carriles antes del 15 de noviembre, con lo que se busca reducir los tiempos de viaje y evitar la dependencia de la variante provisional, que presenta una curva cerrada y dificulta el paso de los vehículos de carga.
Uparela explicó que esta intervención hace parte del plan de estabilización y mejora de la carretera, que incluye obras de contención, drenaje y rehabilitación de calzada para garantizar la seguridad de los usuarios y minimizar los cierres por deslizamientos.
La ANI trabaja de manera articulada con la Concesionaria Vial de los Andes (Coviandes) y el Instituto Nacional de Vías (Invías) para acelerar los trabajos y entregar resultados concretos en las próximas semanas.
El vicepresidente de la entidad aseguró que el compromiso del Gobierno Nacional es mantener la conectividad entre Bogotá y los Llanos Orientales, dado el impacto que esta vía tiene para el transporte de carga, el turismo y la economía regional.
Redaccion: Noticiero del Llano
