Durante su recorrido, la funcionaria se preguntó “¿Qué viene?”, y respondió que el trabajo inmediato estará enfocado en habilitar un carril para el tránsito en un solo sentido, mientras que la variante servirá como paso en el otro.
La ministra también anunció la implementación de soluciones estructurales a mediano y largo plazo, que requerirán un esfuerzo conjunto y la utilización de distintos mecanismos financieros como obras por impuestos, aportes de la concesión y recursos de regalías.
Rojas fue clara en señalar que existe un problema de fondo: actualmente no hay recursos programados para atender los más de 200 puntos críticos que presenta la carretera Bogotá – Villavicencio.
Fuente: Noticiero del Llano