El Foro Mundial de Migración y Desarrollo, que reúne a delegaciones de 40 países y representantes de organismos internacionales en Riohacha, arrancó con un fuerte llamado a reconocer la migración como un derecho humano. La apertura estuvo inicialmente a cargo del presidente Gustavo Petro, pero su ausencia obligó a que la canciller Rosa Villavicencio diera el discurso de bienvenida.Petro llegó al evento cuatro horas después de lo previsto y explicó que su retraso se debió a problemas de salud:
“De tanto viajar en avión se me empezó a dañar el oído medio, clave para la concentración y el equilibrio. Preferí descansar un poco antes de venir”, señaló el mandatario.
En su intervención, el presidente colombiano abordó los desafíos migratorios globales, con énfasis en las políticas de Estados Unidos, criticando las posturas de Donald Trump contra los migrantes:
“No se puede admitir a Trump que diga que los migrantes son criminales y que haga cárceles que son campos de concentración, repetición de Hitler”, afirmó.
Recordó además cuando ordenó impedir el ingreso de aviones estadounidenses que transportaban colombianos deportados esposados, decisión que calificó como un acto de dignidad nacional.
Otro de los puntos más polémicos de su discurso fue la propuesta de “traer la Estatua de la Libertad de Nueva York a Cartagena” como acto simbólico de reparación por la esclavitud.
Petro también anunció que, por primera vez en su gobierno, visitará el Tapón del Darién, corredor migratorio entre Colombia y Panamá que concentra a miles de personas en tránsito hacia Norteamérica.
Finalmente, tras su discurso, el mandatario viajó a Japón, donde cumplirá agenda oficial hasta el 7 de septiembre, mientras en Riohacha continuará la cumbre, cuyo resultado será una declaración no vinculante que instará a los países miembros de la ONU a buscar soluciones conjuntas frente a la migración.
Fuente: Noticiero del llano
